Cuando estés listo para entablar una conversación con tu estudiante de preescolar —incluso si solo quieres saber sobre su día— siempre habrá una manera correcta y una incorrecta de hacerlo. Y si intentas lo segundo, puede que termines en un callejón sin salida.
“Hablar con nuestro hijo de una forma que le permita expresar lo que piensa es extremadamente importante”, explica el Dr. Atilla Ceranoglu, psiquiatra de la infancia y adolescencia de Harvard Medical School. “Tener conversaciones con el niño desde una edad temprana garantiza que padres e hijo se mantengan en sintonía. Esto sienta unas buenas bases para los días más turbulentos de la adolescencia”.
Siendo un experto en comunicación entre padres e hijos, Ceranoglu ofrece consejos para evitar los errores más comunes que cometen los padres al intentar tener una conversación con su hijo.
¿Parece que los ratones se comieron la lengua de tu estudiante de preescolar?
Progenitor: “¿Cómo te fue hoy en la escuela?”.
Hijo: “B”.
Padre: “¿Qué hiciste?”.
Hijo: “N岹”.
Padre: “¿Saliste a jugar?”.
Hijo: í”.
Padre: “¿Con quién jugaste?”.
Hijo: “No sé. Solo”.
¿Te resulta familiar? El niño que no deja de hablar sobre su amigo imaginario o narra la trama de su libro favorito durante horas, de pronto se queda sin palabras cuando quieres saber un poco sobre su día.
“Este intercambio infructuoso suele volverse frustrante para padres e hijos por igual”, explica Ceranoglu. “En estos casos, el error común es creer que un niño puede sentarse como un adulto y dedicarse enteramente a tener una conversación cara a cara”. La realidad es distinta, ¡no solo para los niños, sino también para los adultos!
Los 3 errores más comunes que cometen los padres al hablar con su estudiante de preescolar son:
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Interrogarlo
A nadie le gusta sentir que lo están interrogando, ni siquiera a los niños pequeños. Probablemente, las peores preguntas son las que comienzan con “¿Por qué hiciste…?”.
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Tratar a los niños como adultos.
Los padres tienden a ver a su hijo como un pequeño adulto con las habilidades de comunicación propias de una persona madura. Si tu estudiante de preescolar está molesto porque estás trabajando demasiado, no dirá: “Mami, te ausentarás por muchas horas y no podremos jugar. ¿Y adivina qué? Apenas tengo 4 años, así que no sé del todo cómo vivir con la gratificación retrasada”. En lugar de ello, se pondrá a llorar.
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Querer solucionar todos los problemas.
Solemos dar soluciones a los problemas de nuestro hijo cuando está angustiado. Esto podría transmitirle el mensaje de que es incapaz de resolver sus propios problemas.
Cómo comunicar con tu estudiante de preescolar
Teniendo en cuenta lo anterior, ¿qué deberían hacer los padres?
- Compartir tiempo de calidad
La forma más sencilla de estimular las conversaciones con tu hijo es compartiendo uno de sus pasatiempos favoritos: nadar, pescar, competir en un juego de mesa o simplemente pasar el rato en el patio, indica Ceranoglu. Y ten paciencia. “Espera un bloqueo verbal al principio, sobre todo si es una experiencia nueva para ambos”, explica. “Soporta el silencio. Incluso si has estado media hora pescando en silencio, toma en cuenta que esto es más efectivo que presionar a tu hijo para que hable. Le estás transmitiendo el mensaje más poderoso de la forma más clara posible: estás ahí y lo seguirás estando cuando ese silencio se rompa”. - Evita hacer “preguntas”
En lugar de preguntar: “¿Eso hirió tus sentimientos?”, intenta preguntar: “Vaya, eso hubiese herido mis sentimientos”. Esto le da la oportunidad a tu hijo de responder sin ponerse a la defensiva. Además, sacarás más provecho de sonidos como “mmm” u “oh”, pues estos reflejan que comprendes los problemas del niño de una forma que no lo hacen las preguntas, señala Ceranoglu. - Muéstrate cercano
Cuando tu hijo expresa algo, ayúdalo a definir y aceptar sus sentimientos: “¡Qué triste! Ese era tu juguete favorito”.Lean libros juntos y comenten la historia sobre la marcha. Esto mejorará el vocabulario de tu hijo y también servirá de referencia futura para ambos. Por ejemplo, podrías decir: “¿Recuerdas que Thomas El Tren se sintió apenado cuando todos comenzaron a jugar con Stanley? Sí, puede que ver a tu amigo Jason jugando con otros niños te haya molestado, ¿no crees?”.